No soy para nada un seguidor del humor de Sacha Baron Cohen, creo que es como una mezcla de Adam Sandler con Michael Moore, el primero es para mal y el segundo para nivelar un poco. Creo que en el mejor papel que lo ví, es en el del policía despiadado de «La invención de Hugo Cabret».
Fuera de ello, Cohen nos pone en pantalla una sátira a las dictaduras de medio oriente en las cuales las excentricidades, la falta de respeto total al pueblo y la violencia están a la orden del día. En éste caso, un dictador llamado Aladeen está al frente de su país y vive bajo cualquier tipo de capricho que tiene, por mas infantiles que sean sus pensamientos. Cuando justamente sus ideas llevan al país al límite de los problemas con la comunidad internacional, deberá viajar hacia Estados Unidos para poder dar un discurso al respecto pero sin saber que la percepción de su vida y de la realidad cambiará grotescamente por una serie de eventos desafortunados.
La película intenta ser graciosa y creo que lo cumple por momentos, pero creo que los gags no están a la altura de un humor inteligente y me hicieron reír poco y nada. La película es una mas del montón, y por mas que esté el aporte del gran Ben Kingsley las cosas no llegan a ningún lugar.
El director es Larry Charles y la película dura 83 minutos.
Mi puntaje es un 5, decepcionante. Les dejo el trailer y unas imágenes:
